PELÍCULA POMS

 ¡ALERTA SPOILER!

Poms, titulada en español “mejor que nunca”, es una película que plasma a través de la comedia, diferentes maneras de asumir la vejez. Es un claro reflejo de que nunca es tarde para hacer algo que nos apasiona y como al lograrlo la vida puede tomar otro rumbo y podemos verla de una perspectiva completamente diferente. 

Pero la película no se queda solo ahí, toca varios aspectos sobre el envejecimiento, que queremos contarles:

El envejecer no significa que no puedas tomar tus propias decisiones sobre tu vida, por supuesto existen excepciones, por ejemplo, si padecemos una enfermedad tipo demencia, diagnosticada por un médico, probablemente en algún punto de la enfermedad, no podremos tomar nuestras propias decisiones. Pero lo que sí podemos hacer para tener una buena vejez y gozar de ella es planear y tomar con tiempo esas decisiones, así, nuestra voluntad será respetada por quienes nos están apoyando. Un ejemplo de esto, el manejo de nuestro dinero, si deseamos podemos recibir ayuda para la administración de este, pero si no, debemos ser nosotros mismos quienes lo administremos con la responsabilidad que esto implica.

Si por otro lado, tú eres ahora el responsable de tomar las decisiones sobre la vida de una persona mayor porque ella ha perdido esta capacidad, RECUERDA, lo más importante es siempre recordar y poner por prioridad lo que la persona durante su vida manifestó como gustos, preferencias y que hubiera hecho en una situación similar como la que ahora como su representante legal enfrentas. 

El famoso edadismo, del que ya hemos hablado antes, queda perfectamente plasmado, con ejemplos muy claros. Donde se evidencia la forma en la que lastimosamente por lo general se entiende la vejez, como una serie de limitantes que van apareciendo y que le impiden a la persona tomar sus propias decisiones. Si bien con la llegada de la vejez, una persona puede tener algunas limitaciones, ya sean físicas o mentales, de acuerdo al diagnóstico médico que tenga, no significa que deje de ser sujeto de derechos y  no se deba respetar su voluntad, gustos y/o decisiones, que haya manifestado durante su vida. Por supuesto que nuestras capacidades físicas cambian con el paso de los años y no todos somos iguales, cada uno preserva habilidades, que otros tal vez no. Pero esto no significa, que no podamos continuar realizando las actividades que nos apasionan y nos llenan de vida. 

Las relaciones sociales, la importancia de los lazos estrechos con otras personas, que incluso podemos fortalecer en nuestra vejez. Además de recalcar la importancia de mantenernos activos socialmente, como esto puede impactar positivamente nuestra salud física y mental. La vejez no es sinónimo de quietud ni soledad, la vejez es una oportunidad más en nuestra vida en la que podemos aprovechar cada momento y disfrutarlo con quienes más amamos. 

Nos quedamos además con esta frase, que nos ha parecido real, nos inspira y alienta.  

“No morimos, seguimos vivos en los recuerdos que dejamos a nuestro paso”.